sábado, 29 de diciembre de 2012

Blanco y negro.

Quizás he escrito en negro, no pienso con el corazón si soy sincero, solamente pienso con la parte oscura de mi mente, ¿Por qué soy así? yo quiero reír y volver a sonreír, no todo es negro, pero me cuesta quitarme estas gafas de sol que me hacen verlo todo más oscuro de lo que en realidad es, no conozco el blanco puro, pero ¿Por qué? Por qué no puedo ver el blanco que ocupa mi vida, no supe verlo y no sé verlo, por eso acabo en negro, porque es el único color que puedo ver intensamente.

Quisiera quitarme esta mierda de visión y poder volver al pasado, volver a coger tu mano y hacerte sentir que un color puramente agradable que te haga volar, pero no podré, lo que se debería hacer en estos casos es un misterio y ese misterio se resuelve con el tiempo, intentaré mejorar y sé que lo conseguiré, por eso simplemente os pido perdón a todos, solo soy lo que un pasado construyó, pero desde mis cimientos iré cambiando de color.

lunes, 24 de diciembre de 2012

Un deseo.

Fiestas en las que la familia se reúne para estar en familia, ver películas navideñas y cenar en noche buena, celebrando la navidad, sí, así se resume diciembre, pero yo lo veo desde una perspectiva más detallista, en estas fechas mucha gente come mucho y promete cosas para el año que viene, cosas que casi nunca se cumplen, pero bueno, actualmente estas fiestas consisten en pedir regalos e ilusiones o deseos, yo, sinceramente no pido nada tangible.

En mi lista de deseos está la felicidad, pero no la mía en concreto, y desearía con todas mis fuerzas que se cumpliera este deseo, que no pido porque sea navidad o sea una costumbre en estos días, siempre lo he pedido, pero ahora más que nunca pues se acaba el año y empieza otro, lleno de retos, aventuras y muchas sensaciones y sentimientos que pueden crear o destruir, pero que te moverán al fin y al cabo,  pues por eso desearé que se cumpla mi ilusión y mi deseo, que el dolor te observe a la distancia y no pueda alcanzarte, que decida adentrarse en mí. He aquí lo que deseo.

domingo, 23 de diciembre de 2012

Dónde estás.

Hoy, exactamente 23 de diciembre de 2012, se cumplen cuatro años del fallecimiento de un ser muy querido, como una hermanita pequeña que siempre se alegraba al verme, me recibía con una energía que siempre envidié, tan viva y tan luchadora, hasta el último día movió su cola, la tuvimos desde que solamente tenía dos semanas, la llamamos Kea por un anterior perro que se llamaba así.

Siempre estaba cuando te sentías mal y cuando te sentías bien, le encantaba salir a pasear y corría muy rápido, estuvo casi nueve años a nuestro lado, nunca pensé que un ser vivo como fue esta perrita, podía enamorarme de esa forma, al llegar a casa lo primero que veía era sus grandes ojos llenos de vida y alegría, su energía para correr y su fuerza para saltar, juguetona y fiel.

Hasta ese fatídico día en el que esa maldita enfermedad te debilitó y no pudimos hacer nada, estabas ahí tumbada, sin poder hacer nada, tu felicidad desapareció y la nuestra también, me alegro muchísimo de poder haberme despedido de ti Kea, mi pequeñita, Descansa En Paz como te mereces, fuiste, eres y serás siempre mi inspiración.





domingo, 16 de diciembre de 2012

Sobrecogedor

Es un sobrecogedor sentido extraño
basado en un pasado y en los años
atrapa recuerdos y ensordece el tiempo
desde añoro hasta envidias siento.

Pues fui y poseí, entre los dedos
aquel inusual pero bello aura
que envolvió y lleno de enredos
este alma que sentía pura.

De las tristezas renace el llanto
pero madura y sonríe
pues tras este dulce encanto
seguirá recto, no se desvíe.

martes, 11 de diciembre de 2012

Falta.

Quizás he perdido en muchos aspectos, en bastantes para ser verdad, bueno, es lo que yo pienso. Me da igual últimamente todo, pero a veces me importa muchísimo, estoy en épocas de cambios psicológicos muy raros, y no sé qué hacer, qué pensar...

Soy una persona muy imbécil a decir verdad, sé que todo lo que tengo es necesario y basta para sobrevivir, pero me falta algo, muy importante, me faltas.
Y quisiera vivir, soñar y pensar que algún día una mano agarre mi hombro y me giré bruscamente para luego acercarse a mis ojos mirarlos con una feroz dulzura, decirme - Eres tú-, y fundir mis emociones en un gran...

viernes, 7 de diciembre de 2012

El placebo que nos repara.

En cuanto a deseos sé que he sido muy caprichoso, muy egoísta y en cierta medida infantil. Lo sé, lo siento, no soy para ponerme tan pesado en este tema. Quiero ser alguien, necesito el apoyo de los demás, sí. A veces miro el suelo sin intención de sonreír, sin apenas mostrar una mueca que muestre algún sentimiento que otro, me cuesta levantar la cabeza, me siento seguro en mi mundo aunque deba lanzarme. 

Esas simples palabras que podrían alegrarme la vida, sé que no las escucharé y menos de donde yo quiero que salgan, me he hecho a la idea, aunque muy desganadamente. Intento engañarme continuamente y trato de no hacerlo, pero es que a veces, ese engaño derrama sobre mi dolor una capa de cera que lo oculta temporalmente, me hace sentir vivo de nuevo, pues no es que me falte algo, es que no me han hecho sentir merecedor de esta vida, pero qué remedio, seguiré adelante aunque sea deambulando y arrastrándome, mientras siga respirando seguiré caminando.

Una vez más me refugio en la música en un infinito bucle que no sana la grieta, pero todavía me queda esa cera, que abulta como si la felicidad existiera y mientras lo hace sostendrá estos cimientos que aún sujetan mi cordura, no caigas por favor, álzate.

lunes, 3 de diciembre de 2012

Aprender a perder.

Quizás es el orgullo del recuerdo aún cálido,
aunque pálido bajo las sábanas tan dolido,
he de aceptar que tampoco quise dejarlo
pues así debe ser, el pájaro a crecido
vuela con audacia, dejé de agarrarlo
me hallo sentado frente a la ventana
no es en vano, es mi suspiro más sensato,
así el tambor baja su tempo mañana
y el sentimiento que adoro no mato.

Lejos siento la victoria, en árido desierto,
mas no quiero entretenerme con mi adiós,
si tu sonrisa florece mi destino es cierto
Y aunque tardío llegó al menos,
escasos besos que los labios anhelan,
ni caricias, ni sorpresas, que esperar,
no cesé el duro trabajo de soportar,
aunque no quise aceptarlo,
tuve que aprender, 
pues perder es parte del ser.