miércoles, 9 de octubre de 2013

Para tu corazón.

Querido corazón.

Quiero decirte abiertamente que yo, Tony, poseo un gran sentimiento encubierto en mi pecho hacia tu dueña, tapado con mantas de indiferencia, mantas que cada vez son más frágiles, más trasparentes y dejan pasar la luz de lo que mi tambor está cultivando. Es imposible que cese a estas alturas, lo he aceptado tras tortura y autodestrucción, mas tú -tan bella dama, bella en tu mente, bella en tus palabras, bella en tu dulce voz-, has conseguido hacerme sentir de nuevo vivo. Mil sensaciones rotas, que tú has borrado, aunque sigan en mi historial.

Deseo fervientemente poder sentir tus labios, tus palabras cargadas con tu personalidad, que mi foco sea tu rostro y que se distorsione lo demás, desenfocar el pasado y el futuro, enfocando mi presente, sentir tu perfume, tu amplia sonrisa ocultando dolores internos pero mostrando alegrías externas, tú tan viva.

Contágiame tus emociones, tu alegría, tu misterio, hazme sentir las vivas sensaciones que rondan tu mente, dibújame en tus cuadernos, bueno mejor no lo hagas, necesitarías demasiado color negro para pintar mis sentimientos. Pero dibújate a ti misma y te ruego que me lo entregues, dibújate sonriendo, dibújate viviendo, pero expresa tus verdaderas emociones, tus verdaderos sentimientos.

Aunque me haya ido por las ramas, he expresado levemente lo que siento y lo que deseo. Pero sigo sin saber expresarme como me gustaría, siento sentir lo que siento, pero me alegra saber que eres tú la razón de este latido tan elevado.

Atentamente, este loco enamoradizo.