jueves, 14 de noviembre de 2013

Mi noviembre.

Oh, tan añorado este mes, el preludio al final del año, el mes de un frío que se resiste a llegar. Adoro este mes y sus promesas invisibles, sus viernes de especial importancia, sus vientos helados y cálidos, se pelea el otoño conmigo, tiritan mis manos al salir, sudo a mares al llegar, dónde estará mi norte gélido, aquel páramo que me volvía un cubito de hielo, cubierto por telas hasta la cabeza. Aquellas mañanas que tullido me hallaba bajo miles de mantas, el suelo estaba congelado, el aire tampoco estaba de mi lado. La ropa al ponérmela también estaba fría, joder, todo estaba frío; pero llegaba a la nevera y cogía la leche fría y no me quejaba, qué mudable es mi opinión.

Sinceramente, este mes me hace pensar mucho, terminaron cosas en este mes, es el prólogo del siguiente año, ya lo he dicho ¿No?, empieza tras un octubre de ganas vacías, pero recoge tus pedazos y te reconstruye, este mes cambiará mucho en mí, y te sumará un año a ti. Mi dolor bucal cesará, yo sonreiré con menos peso en la boca pero con menos dolor en mi rostro, los fantasmas estos meses no me persiguen, el miedo se evapora, no entiendo por qué Mi noviembre tiene nombre, no sé por qué mi noviembre tiene tanto peso en mí, cuántos pensarán lo mismo, cuántos pensarán lo contrario.

Los guantes, el gorro, el vaho visible, las gafas empañadas, si llueve, joder cristales inútiles hasta estar bajo techo, me encanta el olor húmedo de la tierra, del césped, el olor del agua que limpia la fachada del sucio edificio, los vientos que traspasaban la ropa y tiritaba el pecho, mis manos frotándose y el aliento intentando calentarlas. ¡Joder, puto charco! Ahora tengo un pie mojado, calcetín empapado y más frío en el cuerpo, aunque peor es cuando resbalo y caigo de culo.

Es mi mes preferido, mi mes frío, mi mes más fogoso para mí, no ha habido recuerdos importantes en este mes -todavía-, pero nadie sabe qué puede ocurrir. Mas no me importa, tengo mis ojos en tu rostro, mi mente en tus labios y mi fuerza se alza y combate el frío. Te hallas lejos, pero cerca te hallo yo.

Mi dulce noviembre.