viernes, 13 de diciembre de 2013

La lentitud en la mirada.

Tantas experiencias, tantas interferencias con la vida. Tanto que me viene y tanto que odiosamente se va. Es el día a día, el día a cuestas, a rastras si hace falta. No hay sentimiento que sobre, ni siquiera sentimiento sin nombre, de la melancolía a la nostalgia, del desazón a la pasión; no está la vida mejor definida que en el subconsciente, creo. Pero me he percatado de que, siempre que la vida nos alimenta el corazón, las sensaciones se ralentizan, pasan a estar a cámara lenta y eso me hace preguntarme, ¿por qué?

Lo he experimentado miles de veces, sobre todo pasa con el recuerdo, cuando piensas en esa persona, cuando me la imagino, caminando, se ensalzan los movimientos, haciéndolos más sutiles, más bellos. Y no entiendo, quizás es para darle más tiempo al cerebro para disfrutar la situación, para poder grabarlo mejor, para grabar cada detalle en la memoria, pues solo me pasa con los detalles que más me encantan o más me destruyen. No entiendo, ni entenderé por qué.

La última vez que me ocurrió esto fue cuando lejos de mi casa la vi, de espaldas, y pensé que era ella. Se ralentizó todo instantáneamente. Empecé a contemplarla durante un largo período de tiempo, escuché su voz, supe que era ella y me pregunté, cómo pudo ocurrir una casualidad como esa, yo tan lejos y cuando ni lo pienso la veo, a ella, a su voz y a ese aura de perfección que desprende. La vi alejarse, la vi irse, hablando, con su dulce voz y yo no hice nada más que mirar, observar y notar como el pecho me decía "¡Eh Mira, es ella!". Eso realmente no duró más de 30 segundos, en mi mente duró horas. Quizás esas horas fueron el tiempo que estuve pensando en ella, en si habría sido correcto decir algo, en si habría cambiado algo decirle algo.

Lo que sé es que eres la ralentización de mis sentidos, la que endulza mi vista, aunque solo sea oyendo tu voz. Pero es así, todo se disfruta más lento, ya sea la culminación de la pasión o comiendo nuestro postre favorito. Lento, todo va lento si ha de ser disfrutado, por eso vivo tan rápido.